Me quedé sin palabras, nada de lo que puedo decir ahora tiene sentido. Cuando llegaste corriendo a abrazarme, todos mis argumentos y mi lógica se invalidaron, ni siquiera tuve el tino de abrazarte de vuelta. Si miro tus ojos, si escucho tu voz o siento el calor de tu cuerpo, no puedo más. No me importa si es 14, si es el 21, si es nuestra primera cita o si cumplimos el año. Estás conmigo- no hay nada más que pueda querer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario